El Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE, en inglés) de Estados Unidos centrará los esfuerzos de sus redadas en tres ciudades cada semana, con un objetivo de al menos 1.200 inmigrantes detenidos cada día, según informó la cadena NBC News.
Apenas una semana de haber asumido la presidencia, Trump ha tomado medidas radicales en materia de inmigración, tras prometer que llevará a cabo la mayor deportación masiva de inmigrantes en la historia de Estados Unidos.
Estas acciones forman parte de una estrategia más amplia de la administración del presidente Donald Trump, quien durante su campaña presidencial priorizó la seguridad fronteriza y la aplicación estricta de las leyes de inmigración prometiendo deportar a todos los inmigrantes ilegales.
Según indicó este martes NBC News, el objetivo del ICE es centrarse cada semana en tres grandes ciudades para sus operaciones.
Esta semana arrancó con las redadas en Chicago el domingo y siguió en la mañana de este martes en Nueva York, en un operativo liderado sobre el terreno por la nueva secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem.
De acuerdo con fuentes citadas por esa cadena estadounidense, la tercera ciudad de la semana será Aurora, un suburbio de Denver (Colorado) de mayoría hispana.
Se calcula que más de 11 millones de inmigrantes indocumentados viven actualmente en EE.UU.
El presidente Donald Trump ha prometido tomar medidas sin precedentes para expulsar al mayor número posible de ellos y frenar el flujo de más migrantes que llegan a la frontera sur.
En sus primeros días en el cargo, Trump declaró una emergencia nacional en la frontera.
Anunció el fin de la llamada práctica de «captura y liberación» – cuando a los migrantes que solicitan asilo se les dan fechas judiciales y luego son liberados a la espera de esos procedimientos –
Trató de anular el derecho constitucional de larga duración de la ciudadanía por derecho de nacimiento, una medida que inmediatamente se enfrentó a desafíos legales y fue bloqueada al menos temporalmente por un juez federal.
La idea es que la semana que viene los operativos de ICE se centren en otras tres ciudades
Además, fuentes citadas por NBC News y The Washington Post indicaron que el Gobierno de Trump ha puesto a los agentes que tiene el ICE distribuidos en sus 25 oficinas a lo alto y ancho del país un objetivo de entre 1.200 y 1.500 inmigrantes detenidos cada día.
En sólo un día, el lunes 27 de Enero ICE detuvo a 1.179 personas, el número más alto desde el regreso de Trump. De ellos, solo 613 -un 52 %- se consideran «arrestos criminales» de inmigrantes con antecedentes penales en Estados Unidos o casos pendientes en otros países.
Las redadas han generado diversas reacciones en las comunidades afectadas. Mientras algunos sectores aplauden los esfuerzos por retirar a individuos peligrosos de las calles, otros critican las políticas migratorias por considerarlas excesivamente estrictas.
ICE busca personas con antecedentes penales; advierte sobre “daños colaterales”

La administración Trump ha dicho que la ofensiva apunta a los criminales, pero ha habido preocupación de que los inmigrantes respetuosos de la ley con diversas formas de estatus migratorio legal también puedan ser detenidos, también conocidos como «arrestos colaterales».
Cuando se le preguntó sobre los arrestos colaterales, Sam Olson, director de operaciones de cumplimiento y deportación en la oficina de campo de Chicago, dijo que eran posibles.
«Tenemos la tarea de hacer cumplir las leyes de inmigración», dijo. «Si alguien está aquí ilegalmente, haya cometido delitos o no, existe la posibilidad de que lo arresten».
Los funcionarios no siempre han revelado el número de inmigrantes con y sin antecedentes penales que han sido arrestados.
«Las ciudades santuario nos dejan fuera de las cárceles», dijo Homan, quien dirigió el ICE como director interino en la primera administración de Trump.
Según Homan, eso crea importantes problemas de seguridad: Cuando un inmigrante indocumentado arrestado por un delito grave es liberado por las autoridades locales, en lugar de ser deportado, «pone en peligro a la comunidad».
«Cuando lo encontremos, estará con otros (y) si están en el país ilegalmente, también vendrán», dijo.
Subrayó que cualquiera que esté en el país ilegalmente está «sobre la mesa».