Donald Trump ha confirmado su intención de declarar una emergencia nacional y utilizar recursos militares para llevar a cabo deportaciones masivas de migrantes indocumentados en Estados Unidos.
Donald Trump activará y ha confirmado que planea declarar una emergencia nacional para llevar a cabo deportaciones masivas de inmigrantes indocumentados. Utilizando recursos militares para respaldar esta medida.
Esta declaración fue anunciada el lunes 18 de noviembre de 2024. A través de su red social Truth Social, donde respondió afirmativamente a una publicación del activista conservador Tom Fitton. Quien había mencionado que la nueva administración estaba preparando tal medida.

Detalles del Plan
- Uso del Ejército: Trump planea movilizar al ejército y a la Guardia Nacional para ejecutar las deportaciones. Lo que representaría un cambio significativo en el uso del ejército en asuntos de aplicación de la ley nacional.
- Objetivo de las Deportaciones: Según Trump, su objetivo es realizar la «mayor operación de deportación en la historia de Estados Unidos». Comenzando con la expulsión de criminales y aquellos considerados una amenaza para la seguridad nacional.
- Costos y Consecuencias: El plan de deportación masiva de Trump podría afectar entre 15 y 20 millones de inmigrantes y se centraría en aquellos con antecedentes criminales. Sin embargo, el uso del ejército para vigilancia nacional enfrenta limitaciones legales bajo la legislación estadounidense. Se estima que deportar a los migrantes indocumentados podría costar miles de millones de dólares anualmente y generar una escasez de mano de obra en sectores clave como la agricultura.
Contexto Político
Trump ha prometido implementar esta estrategia desde el primer día de su presidencia, reafirmando su compromiso con las políticas migratorias que fueron centrales en su campaña electoral. Además, ha designado a varios funcionarios conocidos por su postura dura sobre inmigración para ocupar puestos clave en su gabinete.
Este enfoque se basa en la Ley de Emergencias Nacionales de 1976, que le otorgaría poderes extraordinarios para actuar sin necesidad de aprobación del Congreso, similar a lo que hizo durante su primer mandato para financiar el muro fronterizo.
Imagen: DiarioNY