Las empresas disminuyen el contenido de sus artículos ya sea en tamaño, peso, volumen o calidad. Una práctica de algunas empresas para enmascarar el aumento de precio de muchos productos que compras.
El nuevo argumento económico del gobierno estadounidense es que las empresas aprovecharon el alza de los precios para llenarse los bolsillos, pero les están dando menos producto a los consumidores.
Reduflación, práctica “legal pero poco ética” que mantiene precios pero brinda menos producto
Crea la falsa sensación de que no hay incrementos Si bien la inflación se ha ido moderando, los consumidores todavía están furiosos por los elevados precios de los alimentos.
Con esta estrategia de economía ficción las empresas pretenden enmascarar el aumento de los precios que se registra como consecuencia de los índices inflación que están afectando los costos de producción de bienes y servicios.
El concepto de reduflación proviene de la conjunción de los términos reducción e inflación.
El objetivo principal es reducir la cantidad y/o calidad de las mercancías para que no repercuta directamente con un incremento en los precios, es decir, por el mismo precio se obtiene menor cantidad o calidad.
Sin importar el ajuste que realicen las marcas –precio, cantidad o calidad– el impacto es similar al que se hubiera tenido al aplicar un aumento en el precio. Asimismo, la reduflación táctica por lo general ocurre cuando la reducción se mueve en la franja entre 5 y 10% del volumen total de producto en los casos en que esta merma pasa desapercibida.
El gobierno de EE.UU. ahora arremete contra las empresas por reducir el tamaño de los dulces, los botes de helado y otros artículos, pero elevar los precios o mantenerlos iguales aunque sus márgenes de ganancias siguen altos.
El mandatario comenzó a acusar a las empresas de “estafar” a los estadounidenses con esas tácticas y está evaluando la posibilidad de implementar nuevas medidas ejecutivas para enfrentar esta práctica, según dijeron algunos funcionarios gubernamentales y otros aliados, aunque sin especificar los pasos que podría dar. También es probable que critique la reduflación durante el informe de gobierno que pronunciará la próxima semana.
Además, Biden podría apoyar nuevas leyes diseñadas para otorgarle facultades a la Comisión Federal de Comercio que le permitan investigar y castigar de manera más enérgica la práctica de inflar los precios, incluso en las tiendas de abarrotes.
Los progresistas que presionaron a Biden para que acusara a las empresas mucho antes, y con mayor determinación, por el aumento de precios encomiaron su nuevo objetivo. Lindsay Owens, directora ejecutiva del grupo de expertos liberales Groundwork Collaborative en Washington, afirmó en una entrevista que los comentarios de Biden son oportunos para ayudar a los electores a comprender por qué, ahora que la inflación va a la baja, los precios de los abarrotes y otros productos clave no disminuyen.
“La gente ya no se cree la excusa de las cadenas de suministro”, indicó. “Los anaqueles están surtidos. Cuando intentas explicar el último tramo del camino, esa es una parte importante”.
Dworsky comentó que le parecía muy bien que Biden se hubiera percatado de la fuerza que le puede dar concentrarse en la reduflación.
Recomendaciones para protegerte de los efectos de la reduflación
• Prepara la lista de compras del supermercado con anticipación, esto te permitirá tener objetivos específicos y no caer en consumos por capricho o por ofertas de productos que en realidad no necesitas.
– Revisa los recibos de las compras y consérvalos por un tiempo razonable, esto para poder comparar los precios posteriormente; así puedes saber qué productos han subido de precio, en cuáles ya no hay promociones u ofertas e incluso en cuáles han aplicado la reducción en sus tamaños y presentaciones.
• Compara el gramaje de los productos. Para ello se aconseja cambiar la manera de ver los productos. Estamos acostumbrados a elegir nuestras compras según el precio más atractivo o las ofertas vigentes. Ahora haz un ejercicio de reflexión: compara el precio por gramos, kilos o litros y no por el pack completo. Ahí será cuando realmente podrás ver el costo y si ese producto sufre de reduflación o no.
– No caigas en la trampa de las falsas ofertas. Puede que solo sea una estrategia de mercadotecnia: si tu producto favorito ha bajado de precio, podría ser que también haya disminuido su cantidad o volumen
• Compara precios en varios supermercados. En algunos productos varían según dónde se compren. El precio final lo determina la tienda, que se lleva un porcentaje de beneficio por venta, por lo que estos precios pueden variar.
• Da preferencia las compras a granel o a mayoreo, ya que eso te permite acceder a un mejor precio en la compra y en la cantidad.
• Intercambia tu marca favorita por una opción de mayor tamaño y misma calidad.
Imagen: Hogarmania